- 1 1/4 tazas de harina para todo uso
- 1/4 taza de azúcar granulada
- 3 cucharadas de azúcar glas
- 1 cucharadita de ralladura de limón finamente rallada
- 1/4 cucharadita de sal marina
- 10 cucharadas de mantequilla fría sin sal, cortada en cubos 1/4 taza de harina para todo uso
- 2 cucharaditas de maicena
- 1 cucharadita de levadura en polvo
- 1/4 cucharadita de sal kosher
- 1 1/2 cucharada Té verde Super Matcha de Boku
- 1 1/2 tazas de azúcar
- 3 tazas de huevos batidos
- 3/4 taza de jugo de limón fresco (de aproximadamente 3 limones)
- 1/2 cucharada de ralladura de limón
- Precaliente el horno a 325 grados y forre un molde para hornear de 9″x 9″ con papel pergamino, dejando unas pocas pulgadas de sobra en dos lados para que actúen como asas para sacar las barras terminadas.
- Comience haciendo la corteza de pan dulce. En un procesador de alimentos, combine la harina, el azúcar, el azúcar glas, la sal y la ralladura de limón y pulse varias veces para combinar. Agregue la mantequilla y pulse hasta que se forme una masa desmenuzable. Use sus manos para presionar la masa en el molde preparado y hornee durante 30 a 35 minutos, hasta que esté ligeramente dorada. Dejar de lado.
- En un tazón pequeño, mezcle los huevos, el jugo de limón, el azúcar y la ralladura de limón.
- Dejar de lado. En un tazón mediano, mezcle la harina, la maicena, el polvo de hornear, la sal y Boku Súper Matcha. Agrega la mezcla de huevo y bate para combinar.
- Vierta sobre la corteza de pan dulce terminada y hornee durante 25 a 30 minutos, hasta que el centro esté firme y ya no se tambalee cuando agite la sartén.
- Coloque la fuente sobre una rejilla en el mostrador y deje que se enfríe a temperatura ambiente antes de transferirla al refrigerador para que termine de fraguar, aproximadamente cuatro horas. Una vez firmes, retire las barras de la sartén y córtelas en 9 o 12 cuadrados antes de espolvorear con azúcar en polvo. Servir inmediatamente. Estos permanecerán frescos hasta por 3 días en un recipiente hermético en el mostrador.